El montaje de los amortiguadores es un punto en el que es muy fácil cometer errores. Ese proceso debe ser muy cuidadoso ya que unos amortiguadores bien montados y cargados de aceite de silicona de una manera correcta harán que nuestro coche marque la diferencia en cualquier terreno.
Los amortiguadores son los encargados de que nuestro coche sea capaz de copiar las irregularidades del terreno, separándose lo mínimo posible del suelo; cuanto más tiempo estén las ruedas pegadas al suelo más tracción conseguiremos. La recepción de los saltos es una de las obligaciones que más esfuerzo requiere a nuestros amortiguadores.
Para montar correctamente nuestros amortiguadores, seguiremos el siguiente proceso:
1. Colocar los pistones sobre los vástagos, una vez estén bien fijados con una lija muy fina, nos aseguraremos de que no tengan ninguna rebaba. Una vez repasados verificaremos que se deslizan de una manera suave sobre el interior del cuerpo del amortiguador.
2. Montar las juntas tóricas y espaciadores que realizan la función de retenes sobre el cuerpo del amortiguador. Lubricaremos cada uno de estos elementos con aceite de silicona para evitar dañarlos en los pasos siguientes.
3. Montar la rótula inferior. En primer lugar debemos de calcular la profundidad de esta rótula, ya que para evitar roturas de ésta, el vástago debe entrar hasta el fondo. Para medir la profundidad nos ayudaremos de cualquier llave allen fina y de un rotulador para macar sobre la llave la profundidad máxima, luego trasladaremos esa medida a nuestro vástago para saber hasta dónde debemos de roscar la rótula. Este proceso sólo será necesario para un amortiguador del par delantero y otro del trasero, ya que luego, con la ayuda de un calibre, trasladaremos la medida al otro. Para enroscar la rótula inferior hasta el punto deseado es necesario sujetar el vástago con unos alicates o herramienta similar.
2. Montar las juntas tóricas y espaciadores que realizan la función de retenes sobre el cuerpo del amortiguador. Lubricaremos cada uno de estos elementos con aceite de silicona para evitar dañarlos en los pasos siguientes.
3. Montar la rótula inferior. En primer lugar debemos de calcular la profundidad de esta rótula, ya que para evitar roturas de ésta, el vástago debe entrar hasta el fondo. Para medir la profundidad nos ayudaremos de cualquier llave allen fina y de un rotulador para macar sobre la llave la profundidad máxima, luego trasladaremos esa medida a nuestro vástago para saber hasta dónde debemos de roscar la rótula. Este proceso sólo será necesario para un amortiguador del par delantero y otro del trasero, ya que luego, con la ayuda de un calibre, trasladaremos la medida al otro. Para enroscar la rótula inferior hasta el punto deseado es necesario sujetar el vástago con unos alicates o herramienta similar.
4. Antes de llenar el amortiguador montaremos el diafragma sobre el tapón siendo cuidadosos para no producirle ningún daño.
(by autotec.es)
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