Un aspecto fundamental del automodelismo de competición se basa en sentirte cómodo con el coche que pilotas, para llegar a encontrar un punto más que cómodo se necesita, sobre todo, muchas horas de entrenamiento. A partir de este punto empezarás a conocer a tu máquina a la perfección y ello te permitirá corregir los posibles errores que te lleven a ser un número 1 dentro del automodelismo.
Lo primero que debemos analizar es lo que sentimos al conducir. Si el coche subvira, sobrevira, si necesita más o menos tracción, si requiere una respuesta más rápida y un cambio de dirección más agresivo, o si por otra parte es muy nervioso. Todo lo que notemos nos servirá para sacar la puesta a punto perfecta del circuito. Esto lleva tiempo y siempre tenemos que tener en cuenta que la pista irá mejorando con el tiempo por lo que debemos anticiparnos a estos cambios de la pista, especialmente para las mangas, cuando tardaremos entre media y una hora en volver a salir a la pista, tiempo más que suficiente para echar por tierra lo que teníamos hasta entonces. La dureza a utilizar de las ruedas es esencial, aumentando con tal el agarre el circuito. Como ya he dicho esto lleva tiempo y es sin duda el paso esencial para llegar a ganar una carrera. Por ello es por lo que debemos rodar todo lo posible probando prácticamente todo lo posible. Lo que no podemos hacer es irnos del circuito con ganas de haber probado algo. En lugar de eso debemos pensar que deshechar y que usar para el día siguiente. Cuanto más tiempo estés en la pista mejores sensaciones tendrás de cara a las clasificatorias.
No necesariamente el coche más rápido es el que vaya a ganar. Puede darse el caso que nos saquen 2 ó 3 decimas en la vuelta rápida, pero debemos mantener la cabeza fría y analizar si esa ventaja en una vuelta es extensible a una final. El ritmo es más importante que una vuelta y si somos capaces de rodar 5, 30 ó 45 minutos en la misma décima tener por seguro que pocos podrán superarnos. Lo complicado está en llegar a conseguir un chasis que permita llevar un ritmo cómodo a la vez que suficientemente rápido. Pero por encima de todo siéntete a gusto con tu coche. La potencia sin control no sirve de nada.
No necesariamente el coche más rápido es el que vaya a ganar. Puede darse el caso que nos saquen 2 ó 3 decimas en la vuelta rápida, pero debemos mantener la cabeza fría y analizar si esa ventaja en una vuelta es extensible a una final. El ritmo es más importante que una vuelta y si somos capaces de rodar 5, 30 ó 45 minutos en la misma décima tener por seguro que pocos podrán superarnos. Lo complicado está en llegar a conseguir un chasis que permita llevar un ritmo cómodo a la vez que suficientemente rápido. Pero por encima de todo siéntete a gusto con tu coche. La potencia sin control no sirve de nada.
Saludos, Team Mugen Sanlúcar
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